Habitantes de Xinxiang, al norte de China, quedaron aterrorizados cuando vieron en las calles de su ciudad esta extraña creatura; quizá escapó de los laboratorios que se encuentran en las cercanías, quizá solo es un ejemplar de una raza canina autóctona.

Se trata de un extraño cuadrúpedo de
baja estatura, piel rosada y manchas café, cubierto de pelo únicamente
en su cabeza (un gran mechón blanco al estilo de una mohicana) y su
cola, que semeja la de un caballo (¿o tal vez un xoloitzcuintli
mexicano?)
La ciudad es conocida por los varios
centros de investigación científica y médica que ahí tienen su sede, por
lo cual varias personas piensan que el animal es un experimento
genético que escapó de alguno de esos laboratorios.
Para la policía, sin embargo, no hay
ningún misterio qué resolver, pues el animal es únicamente un ejemplar
de una excéntrica raza china de perro. “Es definitivamente un perro, y
uno especialmente costoso”, declaró al respecto un vocero de las
autoridades.