Hubertus von Hohenlohe, parte de la realeza alemana,
esquiador mexicano, playboy internacional, popstar y trendsetter
aportará el estilo y la extravagancia a la nieve rusa, compitiendo por
sexta vez para el equipo mexicano.

“El Príncipe” Hubertus von Hohenlohe
competirá en sus sextos Juegos de Invierno, ahora a realizarse en Sochi,
Rusia, a sus 55 años, y será, como en otras ocasiones, el único
representante de México en la nieve. Para celebrar esta hazaña El
príncipe Hubertus, con su característica extravagancia, vestirá un traje
de mariachi diseñado por Kappa, siguiendo la regalía tradicional
mexicana con un toque techno, ajustado y aerodinámico, que combina el
estilo jaliscience con un “faux tuxedo” de ecos robóticos.
Hubertus es hijo del príncipe Alfonso
Hohenlohe y la princesa Ira Fürstenberg, parte de la realeza alemana, y
nació en México hace 55 años mientras su familia se encontraba
dirigiendo una planta de Volkswagen. Hubertus vivió hasta los 3 años en
México y regresó a Europa, donde ha vivido toda su vida —habla
perfectamente español, ya que vivió varios años en España. Sin embargo,
este príncipe compite en sus quintos Juegos Olímpicos de Invierno por
México; en la edición de los Juegos Vancouver 2010 fue el único
representante del país azteca en la nieve.
Radicado en Viena, aunque suele
vacacionar en Cabo, Hubertus es un consagrado bonvivant: esquiador,
fotógrafo y cantante bajo el nombre Andy Himalaya. Él mismo se ha
descrito como un “royal disaster” (uno de sus nombres artísticos
también), jactándose de su vida holgada, VIP. Es una de las figuras más
queridas del tour mundial: aparece en todas las fiestas y es conocido
por su carisma y sentido estrambótico y sincrético de la moda (usa
zarapes de colores y trajes de miles de dólares para descender la
montaña y conquistar chicas (ver calendario del príncipe Hubertus fotografiando a sus sexy amigas desnudas en la nieve)). En
alguna ocasión, von Hohenlohe declaró que sigue compitiendo para
mantener el mito del esquiador exótico y heróico de países que no tienen
una tradición invernal, como Jamaica, Ghana y México.
Para este evento en Rusia, Hubertus
quiso honrar a la cultura mexicana. Al parecer, recientemente descubrió
“la increíble y fascinante cultura que tienen en México” por lo que
quiere “celebrar lo que son, pero, claro, con mi propio estilo”. Eso es
“Príncipe Mariachi Olímpico”. Von Hohenlohe seguramente registrará uno
de los peores tiempos en llegar a la meta, pero quién se verá mejor que
él haciéndolo? Ya ha sido candidateado al mejor vestido del certamen y
la prensa lo alaba como el personaje más interesante de las olimpiadas.
La vida de Hubertus es verdaderamente
fabulosa y desaforada. El Príncipe recalca que conoció a Andy Warhol en
la “Factory” en 1979 y se hizo su amigo; en 1982 fundó el equipo
mexicano de esquí; en 2005 sus fotografías de Zidane e Ibrahimovic son
premiadas; en Turín 2006 diseñó el traje más charro, el “Desperado”, un
antecedente seguramente de su traje de mariachi; en total su palmarés le
significa haber participado en 5 olimpiadas, 12 campeonatos mundiales, 4
canciones en los listados de las más oídas y varias exhibiciones en
museos, incluyendo It’s Me!, una colección en la cual todas las fotos
son de él mismo, anticipando el fenómeno de los selfies. Aunque algunos
lo critiquen por usar su nacionalidad a conveniencia, pocos pueden
resistir su gran sonrisa y su bronceado perfecto.