Especial 10 alimentos odiados que debes comerlos... ¡Por tu salud!

De niños creamos ciertas fobias a algunos alimentos, pero de adultos es mejor conocerlos, saber cómo nos ayudan y buscar la manera de disfrutarlos
Por: Ángeles Pino | 28 de Octubre, 2011 | 11:55

Desde niños empezamos a reconocer lo que nos gusta y lo que no. Algunas personas mantienen las mismas preferencias durante toda su vida; por ejemplo, de niños, es muy común que no disfruten de las verduras, aunque al crecer conocen los beneficios y optan por aceptarlas.
Y es que, aunque de adultos vivamos con las mismas fobias que de niños creamos a los alimentos, es ya necesario practicar nuestro conocimiento sobre lo que ingerimos y superar esos "miedos" en busca de una mejor salud.
De hecho, muchos de los alimentos que no nos gustan, son los que mayores aportes nutricionales tienen, es decir que son buenos para nosotros. ¿Cuáles odiabas? ¿Alguno de estos? Con información de mensfitness.com, aquí los alimentos que aunque no te gusten son buenos para ti.
1. Betabel. Cuando lo cortan en trozos, puede parecer ate, aquel dulce de fruta con azúcar, pero que cuando llevas a la boca es un sabor muy diferente. La mayoría de las personas no toma en cuenta al betabel para ponerlo en su dieta, probablemente porque no saben de lo que se están perdiendo.
Resulta que la también conocida como "remolacha", tiene un alto contenido de carbohidratos, que son una fuente rápida de energía natural, no son carbohidratos pesados que son difíciles de sacar de tu organismo. Además, contiene magnesio, calcio, hierro y vitaminas A y C, entre otras cosas. Lee aquí los beneficios que te ofrece, ayuda al torrente sanguíneo.
Para que no parezca extraño y no sea tan desagradable, empezar a introducir el betabel en tu comida, inicia con pequeños trozos, hasta que puedas con toda una ensalada de tan morado tubérculo.

2. Berenjena. ¿Qué es lo que no te gusta de esta hortaliza? Piénsalo, en realidad es muy noble y puede ser combinada  a la perfección con casi cualquier tipo de platillo. 

La berenjena, más que por su sabor o textura, es rica porque contiene una gran lista de nutrientes como Vitamina C, provitamina A, ácido fólico, niacina, fibra, agua y más. Además, posee muy baja cantidad de carbono, proteínas y grasas; y cuenta con una gran fuente de antioxidantes. Conoce aquí sus beneficios.
Para que consumirla no sea un martirio, busca combinarla con algo que sí te agrade, como queso o preparada en lasaña.

3. Aguacate. ¿De verdad existe alguien que no le guste el aguacate? De origen mexicano, el aguacate es una fruta rica en vitaminas del grupo B, como el ácido fólico; es un antioxidante, tiene potasio y ayuda a reducir el colesterol, con problemas de la piel y hasta retraza el envejecimiento, explica lindisima.com.
¿Cómo comerlo? Lo ideal sería preparado como guacamoles, pero si así no te gusta, inicia colocando pequeñas rebanadas en tu sándwich, tostada o torta.

4. Queso Cottage. La verdad es que la imagen que tiene, de trozos de leche cuajada, no es muy apetitosa que digamos, pero este lácteo es rico en proteínas y bajo en carbohidratos, convirtiéndose en el desayuno perfecto, pues reduce el hambre por un largo periodo de tiempo, con una lenta digestión, evitando comer golosinas o comida insana entre comidas.
Acompañarlo con frutas, es la versión más clásica de ingerirlo, pero puede ser parte de un platillo más en forma como en crepas o acompañando hasta un guacamole, indica gastronomiaycia.com.

5. Espinacas. Ya lo dijo Popeye, las espinacas te hacen mucho más fuerte, ¿por qué no hacerle caso? Y es que las espinacas contienen vitamina C, fibra, ácido fólico y son pobres en grasa y proteínas, por lo que se recomiendan para quienes buscan bajar de peso. Ayuda a prevenir el cáncer, enfermedades del corazón, la pérdida de memoria relacionada con la edad y hasta cataratas. Así que como ves, las espinacas sí te hacen más fuertes.
Para degustarla, tienes muchas opciones, pueden ser combinadas con ingredientes dulces, salados, agrios, en preparaciones como postres, acompañantes o plato fuerte.

6. Hígado. No suena nada delicioso, ¿verdad? No lo podemos negar, el hígado no es precisamente algo que inmediatamente te genere antojo. Sin embargo, cuenta con un alto contenido de vitaminas necesarias para crecer sano y fuerte; de ahí que comer hígado sea una tradición medieval. Y es que es una rica fuente de vitaminas A B y D, de proteínas y hierro.
El hígado encebollado es famoso, ¿por qué no lo pruebas?

7. Coles de Bruselas. Algunos dicen que su extraña textura y su sabor amargo son suficientes razones para dejarlos fuera, pero mira el lado bueno, las Coles de Bruselas pueden ser divertidas, si es que las vemos como mini coles con grandes cualidades.

Resulta que son ricamente altas en fibra, proteínas y vitaminas. Se considera que puede ayudar a prevenir el cáncer, y la vitamina C que contiene, beneficia la piel, la vista, el oído y al aparato respiratorio, menciona alimentos.org.es, donde puedes leer la tabla nutricional completa de esta hortaliza.
Hazte "amigo" de las Coles de Bruselas preparándolas con pasta, carnes y quesos. Las puedes acompañar con cualquier cosa.

8. Brócoli. ¿Te gusta que parezcan árboles miniatura, pero no su sabor? Mejor aprende a amarlo por los beneficios que te brinda. Resulta que el brócoli es de gran ayuda para los hombres, porque se sabe que aquellos que consumen buenas cantidades de éste, reducen el riesgo de cáncer de próstata agresivo y enfermedades del corazón. Además, lucha con algunos otros virus y bacterias, pues cuenta con vitaminas A, C y K.

Los beneficios de estos "arbolitos", en realidad son muchos, ya que incluso se recomiendan a diabéticos para eliminar los daños generados a los vasos sanguíneos, puesto que ayuda a producir enzimas protectoras, indica campodeelche.com.
Prepáralos hervidos con algún tipo de aderezo para disimular un poco el sabor que te desagrada, es una opción. Puedes ser más práctico y valiente preparando el brócoli en platillos elaborados que involucren ingredientes como carnes.

9. Nabos. La frase "está del nabo", expresa muy bien es sentimiento que mucha gente tiene sobre este tubérculo, como un alimento desagradable. Pero hay que darle una oportunidad,  los nabos son una fuente importante de vitamina C, fibra, ácido fólico, manganeso, cobre, magnesio, almidón y más, explica euroresidentes.com.
Estos pueden ser un gran sustituto de las papas. ¿Cómo prepararlos? Ingresa aquí para algunas recetas.

10. Pescado. Son muchas las personas que encuentran todo mal con el pescado, desde el olor, pasando por la textura, hasta los huesos y el sabor. Pero, cuando te dejas conquistar por las ilimitadas delicias del mar, puedes obtener grandes recompensas. Y es que los mariscos son una gran fuente de proteínas que ayudan a disminuir el consumo de carnes con grasas saturadas y hasta para bajar de peso.
Se recomienda la ingesta de éste dos o tres veces por semana, para así obtener omega-3 suficiente para reducir el riesgo de enfermedades cardíacas, prevenir diabetes y hasta cáncer. Incluso, se cree que el omega-3  ayuda a luchar contra el asma y la depresión.  Reduce el colesterol y es fácil de digerir.
Para comerlo tienes opciones ilimitadas, desde en sopa hasta envinado al horno. Conoce más sobre el pescado y sus beneficios aquí.