Investigación reciente encuentra una relación entre el ejercicio
físico y la calidad del semen: hombres que mantienen una rutina física
constante, tienen espermatozoides más veloces y normales.

El
ejercicio físico posee múltiples beneficios, entre estos uno
recientemente descubierto que toca a la capacidad masculina de la
reproducción, el semen que por medio de esta actividad podría ser de
mejor calidad.
Científicos de la Universidad de Córdoba
recolectaron la sangre y el semen de 31 hombres, 16 de los cuales
seguían una rutina física constante durante el último año, mientras que
15 se catalogaron como sedentarios. Asimismo su condición física fue
comprobada con pruebas de laboratorio.
Acto seguido se les pidió que durante
los días que duró el experimento, se abstuvieran de eyacular y
realizaran ejercicio físico.
Según los parámetros analizados —el
volumen del semen, conteo de espermatozoides, la morfología de estos y
su motalidad— el esperma de los hombres físicamente activos se movían
más rápido y un mayor porcentaje entraba en la clasificación de
“normales”. Igualmente la concentración del semen y el volumen fueron
mayores, aunque no con una diferencia estadísticamente significativa.
Curiosamente, en un estudio previo se
encontró que el ejercicio excesivo disminuye la calidad del semen en
estas mismas propiedades, así que, según parece, lo ideal es realizar
actividad física moderadamente para así conseguir una buena calidad de
la semilla masculina.