Adam Ostrzenski, médico semi-retirado de Florida, asegura haber descubierto, esta vez sí, la posición exacta del enigmático Punto G, luego de pasar 7 horas inspeccionando la cavidad vaginal de una mujer de 83 años.

El miércoles de esta semana, por medio de un artículo publicado en el prestigioso Journal of Sexual Medicine,
el Dr. Adam Ostrzenski clamó haber encontrado, esta vez sí, la
ubicación exacta del Punto G, esto luego de realizar una exploración
post-mortem en una anciana polonesa de 83 años.
Debido a las restricciones existentes en
Estados Unidos para estudiar cadáveres, Ostrzenski tuvo que trasladarse
a la Universidad Médica de Varsovia, en cuyo Departamento de Medicina
Forense tuvo acceso al cuerpo de esta anciana.
Luego de siete horas inspeccionando las
distintas capas de tejido que componen la pared vaginal, Ostrzenski
descubrió tejido eréctil agrupado en forma de pequeños racimos y
situados a manera de saco a lo largo de un centímetro: “una profunda,
profunda estructura” anidada entre la quinta capa de la pared vaginal,
la fascia endopélvica, la quinta capa y la membrana perianal dorsal.
El anuncio de Ostrzenski fue recibido
por algunos con entusiasmo, pues se reconoce el mérito del galeno para
aislar una estructura específica de la capacidad orgásmica femenina.
Pero igualmente otros han criticado el estudio asegurando que la
evidencia es pobre en comparación con lo escandaloso del
“descubrimiento”, sin mencionar el hecho de que el examen se realizó en
un cuerpo inerte. En este sentido, la manera más obvia de comprobar las
conclusiones de Ostrzenski sería poniéndolas en práctica.